Da el siguiente paso en la educación de tu mascota

Si ya dominas los comandos básicos de obediencia —siéntate, túmbate, quieto, ven—, es hora de elevar el nivel de aprendizaje de tu perro. En esta guía de continuación, exploraremos nuevas técnicas, comandos avanzados y métodos para reforzar el adiestramiento que has iniciado.

Si no viste la 1° parte visita la siguiente publicación


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1. ¿Por qué avanzar a un nivel superior?

  1. Fortaleces el vínculo: Tu perro seguirá ejercitando la mente, mientras refuerza la confianza y la conexión contigo.
  2. Aumentas la seguridad: Entrenar con distracciones, mayor precisión y disciplina brinda más control en situaciones cotidianas.
  3. Promueves un comportamiento estable: La práctica de ejercicios avanzados reduce la probabilidad de aparición de conductas indeseadas, ya que tu perro cuenta con rutinas de obediencia más sólidas.

2. Requisitos previos

  • Dominio de los comandos básicos: Asegúrate de que tu perro responda de forma consistente a “Siéntate”, “Túmbate”, “Quieto” y “Ven”.
  • Control de impulsos: El perro debe poder mantener la calma frente a leves distracciones o ante la presencia de otras personas o animales.
  • Refuerzo positivo como base: Continúa elogiando y recompensando los aciertos. A medida que progreses, alterna los premios comestibles con caricias, juegos o simples felicitaciones.

3. Nuevos comandos y ejercicios

3.1. “Junto” (caminar al lado)

  • Objetivo: Que el perro camine a tu lado sin jalar la correa.
  • Cómo enseñarlo:
    1. Sujeta la correa corta y coloca a tu perro a tu izquierda (o derecha, según prefieras).
    2. Di “Junto” antes de dar los primeros pasos.
    3. Avanza lentamente y prémialo con una caricia o una golosina cuando mantenga su posición a tu lado.
    4. Si tira o se adelanta, detente y vuelve a colocarlo correctamente.
  • Consejo: Practica en interiores o zonas con pocas distracciones al inicio. Poco a poco, aumenta la dificultad en lugares más concurridos.

3.2. “Quieto” con mayor duración y distracciones

  • Objetivo: Que el perro permanezca en su sitio por más tiempo y pese a estímulos externos.
  • Cómo practicar:
    1. Pídele a tu perro que se siente o se tumbe.
    2. Di “Quieto” y aléjate progresivamente.
    3. Incrementa el tiempo antes de regresar a él y darle la recompensa.
    4. Incorpora distracciones suaves (sonidos, objetos en movimiento), reforzando el éxito con un premio si se mantiene inmóvil.
  • Consejo: Evita dar pasos muy grandes de una sola vez. Aumenta la dificultad gradualmente para no abrumar a tu perro.

3.3. “Suelta” o “Deja”

  • Objetivo: Que el perro deje de sostener un objeto o deje de comer algo por orden.
  • Cómo enseñarlo:
    1. Ofrece al perro un juguete o golosina que pueda sostener.
    2. Di “Suelta” o “Deja” con tono firme.
    3. Muestra una recompensa más atractiva para que suelte lo que tenga en la boca.
    4. Tan pronto como lo haga, elógialo y entrégale el premio (o devuélvele el juguete si quieres que retome el juego después).
  • Consejo: Practica en diferentes contextos (con juguetes, comida, etc.) para que el perro comprenda el concepto de “soltar” sea cual sea el objeto.

3.4. “Mira” o “Atento”

  • Objetivo: Dirigir la atención del perro hacia tu rostro cuando lo ordenes.
  • Cómo enseñarlo:
    1. Coloca una golosina frente a la nariz de tu perro.
    2. Súbela lentamente a la altura de tus ojos.
    3. En cuanto tu perro te mire directamente, di “Mira” o “Atento” y recompénsalo.
  • Consejo: Este comando es muy útil para captar su atención previa a dar cualquier otra instrucción.

4. Tips para consolidar el aprendizaje

  1. Refuerza en diferentes contextos: Si tu perro solo entrena en casa, podría desobedecer en el parque o en la calle. Varía los espacios de práctica para generalizar los comandos.
  2. Ajusta la dificultad: Comienza con estímulos leves y ve incorporando sonidos, otros perros o personas.
  3. Sesiones planificadas: Estructura ensayos de 10-15 minutos, dos o tres veces al día. Con el tiempo y la motivación adecuada, tu perro mantendrá la atención.
  4. Paciencia y perseverancia: Cada perro avanza a su propio ritmo. No te frustres si aparece alguna resistencia o retroceso; mantén la calma y retoma el proceso.

5. Mantén una actitud positiva

La comunicación asertiva y el refuerzo positivo siguen siendo claves en esta etapa avanzada. Observa las reacciones de tu perro para detectar posibles señales de estrés o agotamiento. Si se muestra inquieto, haz una pausa y retoma después de un breve descanso.

¡Continúa disfrutando de este viaje de aprendizaje! El entrenamiento avanzado no solo fortalece la obediencia, sino que desarrolla la confianza y la complicidad entre tú y tu can.


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